¿Sabías Qué?
¡Tenemos Algunos Trucos Fáciles y Creativos para Estimular tu Mente Cansada!
Establecer una rutina, evitar el exceso de pantallas y realizar juegos de palabras ayuda al desarrollo cognitivo.
Una de las mejores maneras de mantener activa nuestra mente es a través del establecimiento de patrones sencillos que tendrán un impacto positivo en nuestra mente, como, por ejemplo, tener horarios regulares de sueño y comidas, mantener la organización, y/o preocuparnos siempre de nuestra higiene personal.
Asimismo, los expertos afirman que es de suma importancia hacer ejercicio y tener un buen descanso para establecer una rutina que mantenga la salud mental. Estudios han demostrado que el abuso de las pantallas afecta nuestro sueño, y si no dormimos bien, nuestra vida se puede convertir en una situación de caos.
Aquí te damos algunos tips sencillos y prácticos que podrás practicarlos a un horario que se adapte mejor a ti.
1. Elaboración de Crucigramas, Sudokus, entre otros.
A la hora de hacer ejercicios específicos para fomentar la actividad cognitiva, elige algo que más te guste, como, por ejemplo: Crucigramas, Sudokus, juegos de palabras encadenadas, sopas de letras, preparar listas, leer una receta e intentar recordar los ingredientes, hacer cálculo mental, entre otras. La clave es elegir actividades que para nosotros supongan un reto.
2. Técnica del Mindfulness o Atención plena.
Para conseguir no solo tener más actividad mental, sino también conseguir calmar un poco la mente, muchas veces fatigada por la constante exposición a pantallas y preocupaciones, los expertos recomiendan iniciarnos en la técnica del mindfulness, con el objetivo de aprender a controlar mejor nuestra mente.
Mindfulness o atención plena significa prestar atención de manera consciente a la experiencia del presente con interés, curiosidad y aceptación. Mientras que la meditación busca lograr un estado de atención centralizada en un pensamiento, un sentimiento, un objeto o algún elemento de la percepción sensorial para liberar la mente de pensamientos nocivos, el mindfulness propone atender al momento presente sin juzgarlo.
De origen budista, el mindfulness fue popularizado en Occidente en los años 70 por Jon Kabat-Zinn, profesor de Medicina en la Universidad de Massachusetts, que comenzó a aplicarlo de un modo terapéutico a pacientes con problemas físicos y psicológicos, dolor crónico o estrés.
Esta práctica tiene un enfoque pragmático y está desvinculada de creencias religiosas o filosofías de vida concretas y se propone como herramienta para mejorar la calidad de vida de las personas.
Cómo practicar mindfulness
Busca lograr un profundo estado de conciencia durante las sesiones. Para ello se usan técnicas concretas que pretenden conseguir que la conciencia se relaje y no fabrique juicios de sensaciones, sentimientos o pensamientos.
Su objetivo es separar la persona de sus pensamientos para que ésta los reconozca y pueda poner en duda los patrones mentales. Se otorga un peso fundamental al “aquí y el ahora” mediante la atención plena al momento presente.
Beneficios…
• Practicar media hora diaria de mindfulness también alivia los síntomas de la depresión o la ansiedad, según una investigación publicada en "Journal of Internal Medicine".
• Mejora la memoria, la capacidad de concentración, la autoconciencia y la inteligencia emocional.
• Aporta calma y serenidad.
• Se asocia con la mejora en la creatividad y en la percepción de soledad en el caso de las personas de la tercera edad.
• Ayuda a dormir mejor por las noches.
Debes saber que...
• Es beneficiosa si se realiza bajo una pauta de entrenamiento correcta.
• No es inocuo en todos los casos, pues aquellas personas que sufren una crisis personal profunda como un duelo o un estado depresivo grave pueden usar el mindfulness como medida preventiva, como una estrategia puntual dentro de una terapia mucho más alta, pero no como tratamiento.
• Debe ser voluntaria, no impuesta.